Morcillas Morvega inicia sus andaduras en el año 1922, cuando la abuela Josefa comienza a elaborar morcillas para sus clientes en una pequeña tienda. Desde entonces, se ha mantenido el método artesanal y los mismos ingredientes naturales.
Método Artesanal Sólo con Ingredientes Naturales
Morcillas Morvega utiliza únicamente productos naturales en la fabricación de sus productos: El corazón de la cebolla, grasa de cerdo, pan, sangre, pimentón, ajo y sal.
Seleccionamos rigurosamente ingredientes de la tierra, que le dan el sabor característico de la morcilla de la montaña.
Todos los ingredientes se amasan, pican y se embuten en tripa natural. Luego se les da una cocción larga a fuego lento en horno. Una vez frías, ya están listas para comer con su sabor peculiar y exquisito.
No utilizamos ni colorantes, ni conservantes ni ninguna clase de especias.
Un método artesanal heredado por la tercera generación y que ahora está en manos de Jesús Moreiras.
Nuestras morcillas son ricas en proteína, hierro y vitaminas. Casi no tienen colesterol. Se pueden comer cocidas, fritas o al microondas. Además son pobres en sal y aportan minerales y antioxidantes.
Innovación
Morcillas Morvega apuesta también por la innovación en sus productos y procesos de fabricación, aportando nuevos productos como:
- Mousse de Morcilla (morcilla sin tripa en tarros de cristal de larga duración, que sólo hay que calentar para consumir).
- Morcilla con queso de cabrales, cuya mezcla deja un sabor espectacular.